martes, 4 de octubre de 2016

Esperando a Matthew.



Esperando a Matthew.
Por Orestes Díaz.
La incertidumbre enloquece, la espera desespera y cuando la visita no agrada el tiempo se torna peor. Ese es el estado de los orientales que estamos atentos a cada sonido de la radio o imagen televisiva para saber qué trayectoria lleva el fortísimo Huracán Matthew. Anoche viví una imagen triste pero salvadora. Dos abuelos, bien mayores, con maletines, una hija acompañándoles y un pequeño nieto con un colchoncito a cuestas. Parecían hormigas moviéndose en la oscuridad de la noche buscando otra guarida que no fuera su casa. Ellos viven cerca de un río el cual debe crecer en pocas horas debido a las lluvias del fenómeno. Alguien les abrió las puertas bajo un techo seguro. Así somos los cubanos.

Matthew debe azotar Cuba en breve.

Matthew debe azotar Cuba en breve, quizás salga por región cercana a Banes. Estamos protegidos. Gracias a los que se interesan por nosotros.
El doctor José Rubiera, del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología, indicó que de seguir con la vaticinada trayectoria próxima al norte, la entrada del centro del meteoro a tierra cubana debe producirse en las primeras horas de la noche, por algún punto de la parte este de la provincia de Guantánamo. Ya desde el final de la tarde deben empezar a sentirse vientos huracanados superiores a los 120 kilómetros por hora.
Subrayó que Matthew continúa siendo un huracán de gran tamaño acompañado por una extensa área de nublados con fuertes precipitaciones, mientras su radio de vientos con fuerza de tormenta tropical abarca alrededor de 295 kilómetros a ambos lados del ojo del sistema ciclónico tropical, y los de huracán están en el orden de los 65 kilómetros.
Por tanto, insistió, sus efectos se sentirán en una amplia franja del territorio oriental que pudiera ser mayor en caso de ocurrir alguna inflexión algo más hacia el oeste.
De acuerdo con los cálculos realizados por los especialistas del Instituto de Meteorología, pueden registrarse en algunos puntos de la costa sur de Guantánamo olas con alturas cercanas a los nueve y diez metros.
Matthew mantiene el rumbo norte ganando algo en velocidad de traslación que ahora es de 15 kilómetros por hora.

Durante las últimas horas Matthew se ha mantenido poco cambio en intensidad. Los vientos máximos sostenidos son de 230 kilómetros por hora, con rachas superiores, por lo que continúa siendo un intenso huracán categoría cuatro en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco. Su presión mínima central descendió a 934 hectoPascal.

En las próximas 12 a 24 horas el huracán Matthew mantendrá similar rumbo y velocidad de traslación, con fluctuaciones en su intensidad, aunque se mantendrá como un intenso huracán.

Los vientos con fuerza de tormenta tropical comenzarán a sentirse en las provincias del sur oriental desde esta mañana, y desde el final de la tarde los de vientos huracanados, superiores a los 120 kilómetros por hora con rachas. Un gradual incremento de las lluvias, que serán intensas con acumulados entre 200 y 300 milímetros, siendo superiores en algunas localidades y zonas montañosas.